Un par de extrañas muertes ocurrieron en Río de Janeiro, Brasil, en 1966. A día de hoy, aún no se han explicado la muerte de dos hombres que se encuentraron muertos en unas circunstancias únicas. De hecho, todavía no está claro si las muertes fueron auto-inducidas o fue un asesinato.
Las muertes son lo suficientemente extrañas, teniendo en cuenta que las "víctimas" fueron dos hombres de mediana edad relativamente saludables que murieron juntos, pero también había un puñado de objetos con los hombres que hicieron el caso aún más confuso y dieron lugar a su nombre popular, el Caso de las máscaras de plomo.
El 17 de agosto de 1966, dos reparadores de electrónica de Campos dos Goytacazes, dejaron la ciudad diciendo que iban a comprar provisiones para el trabajo y un auto. Al parecer, tenían el dinero para comprar un vehículo con ellos. Los hombres - Miguel José Viana y Manoel Pereira da Cruz - se detuvieron más tarde en un bar para tomar una botella de agua. El camarero dijo más tarde que Miguel parecía tener prisa, pues estaba revisando con frecuencia su reloj. Esa fue la última vez que vieron a la pareja vivos.
Tres días más tarde, Jorge da Costa Alves encontró los cadáveres de los dos hombres en la colina de Vintém , Río de Janeiro. Naturalmente, él alertó a la policía, que llevó a cabo una investigación. , quienes comprobaron el último paradero conocido de los hombres y descubrieron los elementos diversos que representan sus últimos momentos con vida. Ambos hombres estaban vestidos con trajes y con abrigos impermeables. Tenían máscaras de ojos de plomo sin agujeros (uno de ellos la llevaba puesta), como unas que se podrían usar para protegerse de la radiación. También había una botella de agua vacía, dos toallas y un cuaderno. El cuaderno confunde el caso aún más. Contenía unas cuantas notas en portugués. Traducido, se leen:
"Domingo: una píldora después de la comida
Lunes: una píldora después del desayuno
Martes: una píldora después del almuerzo
Miércoles: una píldora al acostarse
La siguiente nota rezaba lo siguiente: A las cuatro y media de la tarde, estar en el lugar fijado A las seis y media tragar la píldora Después, proteger la cara con metal y esperar que aparezca la señal."
No se encontró el dinero para el auto, pero si algo de dinero y sus relojes.
Las víctimas
Ninguno de estos elementos presentan ninguna respuesta; sólo plantean más preguntas.
Los trajes: Los trajes sugieren que los hombres se reunían con alguien. Sin embargo, sin conocer su atuendo habitual, es difícil de decir.
Las máscaras de plomo: Las máscaras de plomo sugieren que los hombres esperaban radiactividad. El problema es que no se detectó radiación en el sitio. Existe la posibilidad de que Vintém no fuese el "lugar acordado", y que los hombres necesitaban las máscaras en otros lugares. Examinaron la posibilidad de que las máscaras hubieran sido fabricadas para proteger los ojos de una eventual radiación. Encontraron máscaras similares en la casa y en la oficina de Miguel José Viana, así como restos del plomo que se usó para confeccionarlas.
Las toallas y las chaquetas: Las toallas indican que los hombres esperaban humedad, al igual que las chaquetas. Simplemente no hay explicación para esto. Hubo un reclamo de una familia que avistó un OVNI en esa misma zona y se dice que ambos compañeros estaban obsesionados con los extraterrestres.
Las Notas: Aquí reside el mayor misterio. ¿Con quién se iban a reunir en el "lugar acordado"? No tenemos forma de saberlo. Luego, están las cápsula de las que hablaban en el cuaderno.
No se encontró ninguna cápsula y la autopsia no pudo revelar ningún envenenamiento, no porque no lo hubiera, simplemente porque en un descuido y con la cantidad de trabajo de los forenses, los órganos fueron puestos en un lugar donde se descompusieron rápidamente, haciendo imposible poder hacer ningún examen toxicológico en ellos. Por lo tanto, no sabemos si los hombres tomaron las cápsulas o lo que contenían. Para ser literal, ni siquiera estamos seguros de si las notas se refieren a ese día. "Esperar a que aparezca la señal" obviamente significa que estaban a la espera de que alguien les diga que se colocaran las máscaras.
Una explicación es que los hombres se reunían con alguien por un acuerdo clandestino en el que intervenían materiales radiactivos. Sin embargo, eso no explicaría la mención a la cápsula, las toallas o las chaquetas. Otra explicación es que se estaban llevando a cabo algún experimento no oficial, aunque no hay evidencia de un experimento que condujera a su muerte, pero sí habían comprado equipamiento electrónico sofisticado y algunos dicen que estaban intentando captar señales provenientes del espacio.
Pueden haber sido engañados, asesinados y arrojados en la colina, aunque no había pruebas de violencia o lesiones violentas. Además se descarta la posibilidad de un infarto, pues sería casi imposible que murieran a la vez.
Como una última explicación nada razonable, también pueden haber estado esperando un viaje intergaláctico o intentaron cruzar a través de un agujero de gusano por el que esperaban cierta radioactividad. Quizás no estaban muy cuerdos, o quizás sí...