Estúpidas vacas

En el primer día, Jeremy se para enfrente del ganado. "Están haciendo eso otra vez". Se rasca la cabeza. Él no tiene tiempo para esto.

Sus vacas están cubiertas de cicatrices, rebosante de heridas a lo largo de la cabeza y el pecho. Él mira y sabe que a menudo vagan cerca de la cerca eléctrica.

Pero sólo últimamente empezaron a actuar de esta manera. Algunas de ellas hacen formaciones en círculos, gritando. También sabe que otros animales han estado sufriendo de heridas punzantes a lo largo de sus costillas y el vientre.


"Estúpidas vacas '", suspira con rabia mientras camina hasta la cerca. Él sabe cómo de estúpido puede ser el ganado. Se pasa las horas del día sintonizando el voltaje de la cerca. Jeremy es un agricultor en toda regla. Él no fue a la escuela. Él sólo se acuerda de crecer con su padre aquí, que falleció hace algún tiempo. Ahora sólo se preocupa por el resultado de su ganado, y sabe lo que tiene que hacer.

En el segundo día, Jeremy se detiene en su camioneta de un largo día de venta de cultivos y frutas en el mercado de pulgas en la ciudad. Él cierra la puerta y mira hacia el campo. Todo el círculo de ganado en el otro lado están en una situación de pánico. Por otro lado, una de las vacas ha tratado de saltar la cerca. Su fangosa, pero lechosa piel amarilla estaba manchada de sangre, ya que había luchado duro dentro de la cerca de alambre. "Malditas estúpidas vacas", "Jeremy siente la pérdida. Aunque, cuestiona sus motivos para sí mismo. El ganado es estúpido, después de todo.

En el tercer día, Jeremy está cubierto de barro y la lluvia. Él intenta todo para tirar de la vaca muerta de los cables, pero no se mueve. Apesta y es demasiado pesado; él tira y empuja incómodamente. Las otras vacas permanecen inmóviles en el otro extremo de la valla bien lejos de Jeremy. Mientras termina su lucha con el cadáver, nota que dos vacas están mucho más hinchadas; deben dar a luz pronto.

En el cuarto día, una vaca joven nace justo cuando Jeremy predijo. Él observa desde su ventana; la mañana es gris con un trueno en la distancia. La vaca madre lame a su becerro; todavía acurrucado con los otros bovinos en el extremo más alejado, al norte del corral. Él planea vender los terneros jóvenes, para hacer un montón de dinero con ellos. 

En el quinto día, el joven ternero se ha ido. Las otras vacas se agitan continuamente en estado de pánico, accidentalmente chocándose unas con otras. Mientras tanto Jeremy agarra la vaca muerta por los oídos y trata de sacarla de la maraña de cables en la que está atrapada.

Se electrocuta accidentalmente al hacerlo y se aleja. Ha creado más de un lío.

La lluvia sigue, pero el barro es casi insoportable. ¿Qué iba a hacer con la vaca muerta? Su estómago, cortado por el alambre va derramando sus entrañas. "Estúpidas vacas...".

En el sexto día, Jeremy camina rascándose la barba, mirando por encima del cadáver de la vaca electrocutada.Se fijó en la cabeza y las piernas delanteras; las únicas dos cosas que no se enredaron en el alambre. Levanta el muñón para comprender la herida.

El corte es muy sucio. Se ve roído, o tal vez picado por algo. Algo con muchos bordes dentados o dientes. Su frustración con la vaca atrapada hierve rápidamente. "¡Mierda!"  Qué lío. Si alguien se acerca al corral y lo ve, ¿qué va a tener que decirles? Por suerte nada se ha entregado aquí durante años, o de lo contrario podría tener que enfrentar cargos por lo que está pasando en su propiedad.

En el séptimo día, se despertó temprano persiguiendo coyotes con una escopeta. Tal vez son lo que han estado agitando las vacas estúpidas en pánico. Se dirige al corral con dos cubos en la mano. Las vacas tienen mucho miedo. No comen y están más delgadas. Ganado como este no pueden ser utilizados para nada. Necesita la carne de las vacas para comer, así que trata de relajarse de la mejor manera que puede.

La gente de la ciudad le ha recomendado na comida especial. El ganado tiene que comer para estar saludable de nuevo. De todas formas Jeremy sigue comiendo su carne y está muy saludable.  La vaca que había dado a luz es la más enfermiza. En ella se establecen un estado de estupor. Tal vez está sufriendo de problemas con la separación, o tal vez se insiste en el proceso de nacimiento. Jeremy sale del corral, con la esperanza de que su ganado coma algo. Él no necesita más líos, sólo mucha carne, vacas sanas.

En el octavo día, las piernas de la  vaca madre se han roto, grita en voz alta, que es lo que inicialmente despertó a Jeremy antes del amanecer. Él la ve cojeando, balanceándose como un péndulo. Se están muriendo de hambre, pero no van a comer. Se han estresado tanto ​​que han recurrido a morderse unas a otros en defensa propia.

La otra vaca embarazada camina con un feto muerto por fuera de su lado posterior. No parece importarle. "Malditas estúpidas vacas!" Jeremy se cruza de brazos en desafío ante la terrible suerte que ha asolado su granja. Él todavía no entiende por qué están actuando tan raro. Él no puede lidiar con el ganado así...

El día nueve, las tierras de cultivo apesta a muerte. El calor de la mañana atrae cientos de moscas a la vaca atrapada sin cabeza, así como dos nuevas vacas recién muertas de hambre,  deshidratadas y el becerro nonato. Hubo mucha limpieza que hacer.

El ganado apesta y además, llenas de heridas de quemaduras creadas por la valla. Sus ojos brillan apenas un gris tenue sin vida, mientras que la saliva rezuma constantemente de sus bocas. Ninguno de ellas entro en pánico por más tiempo. No comen, o se mueven. Parece que están demasiado cansadas de su pánico constante.

En el décimo día, Jeremy abre su congelador roto, pone la cabeza mojada de Dalila en un plato, se sienta y clava su tenedor en la rosada nariz, arrancando un pedazo masticable. Su boca chisporrotea, llena de carne fría. "Vacas estúpidas!" Él deja escapar una gran carcajada acentuado y cierra el puño sobre la mesa.

Créditos a corpsecreature

Para quién no lo haya pillado, este creepypasta trata sobre la enfermedad de las "Vacas locas", y Jeremy está infectado por comer "carne contaminada".