El avión (que tiene menos de 1.000 hs. de vuelo) había sido adquirido por la línea aérea Eastern un mes antes y era sensiblemente superior en confort a los Jumbos 747 y a los Douglas DC-10.
Al comando de la nave se encuentra el experimentado piloto Bob Loft, y lo auxilian el primer oficial Albert Stocckstill y Don Repo.
La tripulación
Llevan 163 pasajeros, que junto a 13 tripulantes, suman 176 personas.
Al llegar a Miami y accionar los mandos, comprueban que parte del tren de aterrizaje no responde; por lo que, comunicados con el control se les ordena sobrevolar el aeropuerto a 2.000 pies de altura.
Decidieron poner remedio a aquel imprevisto. Conectaron el piloto automático y empezaron a volar en círculo sobre el Parque Nacional de los Everglades mientras intentaban descubrir qué había originado el fallo mecánico. Don Repo se desabrochó el cinturón de seguridad y se dirigió al foso del infierno, también conocido como “banco del infierno”, una pequeña trampilla cuadrangular que da acceso a la parte inferior del avión y a los compartimentos del tren de aterrizaje.
Sin dudarlo un instante se introdujo en el claustrofóbico habitáculo para encontrar la avería y descartar que fuera un error del cuadro de mando. Si la rueda estaba bloqueada, podría solucionarse manualmente. Si no lo estaba, se debería a un mal funcionamiento del dispositivo luminoso. Pero los tejemanejes del azar o el destino quisieron que justo en ese instante se desactivara el piloto automático sin que nadie en la cabina reparara en ello.
El Vuelo 401 comenzó a perder altura. Nadie percibió el descenso. Ni siquiera las dos llamadas desde la torre de control del Aeropuerto Internacional de Miami –cuyos trabajadores habían observado el ilógico comportamiento del avión en los radares– alarmaron a los miembros de la tripulación. El avión se precipitaba contra el suelo a una velocidad de 366 km/h hacia el área pantanosa de los Everglades.
El comandante Bob Loft y su primer oficial Albert Stocckstill fueron rescatados ya muertos; mientras que Don Repo luchó un día más contra la muerte, pero finalmente, corrió la misma suerte que sus dos compañeros.
Lo verdaderamente insólito comienza a partir de ese momento:
Dos de los tres pilotos, Bob Loft y Don Repo se aparecerán a tripulantes y pasajeros de los vuelos de la línea Eastern en el trayecto Nueva York-Miami.
Aunque desde un primer momento, la empresa aérea trató de ocultar y negar los hechos asombrosos que sucedían y prohibió a su personal comentarios al respecto; algunas informaciones se “filtraron “ al público.
Como curiosidad, antes de partir, la azafata Mercedes Ruíz se sacó una foto con las demás azafatas. Ella dijo "chicas, vamos a sacarnos la última foto", realmente fue la última para todas ellas excepto para la misma Ruiz...
Las 8 azafatas que murieron ese día y Ruiz (arriba derecha). La foto fue sacada de la cámara que sobrevivió al accidente.
Fue así que el investigador John Fuller se interesó por saber que pasaba realmente en los vuelos Nueva York-Miami de Eastern Airlines, concluyendo que “hay extrañas apariciones que pueden catalogar como sucesos paranormales”.
Las apariciones de Bob Loft y sobre todo de Don Repo (el que más se ha visto) forman parte de una verdad.
Aparecen en forma de espectros que se ven flotando sobre las alas de los aviones, también como nubes fantasmagóricas y en algunos casos surgen voces “de ninguna parte”, dando desde enigmáticos mensajes, hasta precisas órdenes y recomendaciones técnicas para evitar catástrofes.
Fuller recogió entonces diferentes testimonios:
- En marzo de 1973 las azafatas Denisse Woodfrud y Ginny Packard trabajando en un mismo vuelo de la empresa Eastern, desde Nueva York, con destino a Miami; ven por separado la “presencia de un ser” incorpóreo que confirmaban, se parecía a Don Repo.
- En el mismo año una azafata al prepararse para despegar desde Nueva York (por supuesto, con destino a Miami), observa que hay un pasajero de más que no figura en la lista, sentado en primera clase, vestido con uniforme de comandante de la empresa. No logra averiguar quien es ni por que no está en la lista de pasajeros, sin embargo después de llamar al comandante este asegura asombrado que es Bob Loft.
- En febrero de 1974 Don Repo se manifestó primero a dos azafatas, luego al ingeniero de vuelo y posteriormente alertó sobre un peligro en la nave.
- En la cabina de mando se materializó el rostro de Repo en una ocasión y se escucha su voz que dice claramente: “Presten atención, porque hay peligro de incendio”. Cuando el avión llegó a Miami, uno de los motores no respondió y al tocar la pista, la nave se incendió. Solo un rápido operativo (para el que estaban preparados gracias a la aparición de Repo) evitó la tragedia.
John Fuller, luego de años de investigación y de recoger testimonios, logró que la empresa aérea reconociera los hechos y llegó a unas conclusiones. Los hechos suceden siempre en aviones L-1011 de la empresa Eastern Airlines, incluso en aviones que esta compañía ha alquilado a otras líneas. En la mayoría de los casos, los aviones en los que se han manifestado las apariciones, llevaban piezas recuperadas del trágico Vuelo 401, y siempre ocurren en la ruta Nueva York-Miami.
- El ingeniero estaba a mitad de la inspección rutinaria que se efectúa antes del vuelo cuando Repo apareció y le dijo “no tienes por qué preocuparte por la inspección, ya la he hecho yo”.
La historia de los fantasmas se expandió tanto que la compañía amenazó con despidos a quien siguiera contando que había visto "fantasmas".
Recreación del caso